21:40 | Autor Iglesia Hogar


En declaraciones a un medio local, Monseñor Antonio Marino, obispo electo de Mar del Plata expresó su alegría por esta nueva tarea que le encomienda el Santo Padre al frente de la diócesis “voy con la idea de continuar la tarea que han hecho mis muy ilustres predecesores, Monseñor Rau, Monseñor Pironio, quien fue mi primer rector del Seminario de Buenos Aires, Monseñor García, Monseñor Arancedo y Monseñor Puiggari. Vengo a fortalecer la comunidad eclesial que es la tarea de todo obispo. Sé que no voy a un terreno baldío, sino que voy a continuar y profundizar la obra hecha por otros; además está la tarea misionera, salir a proponer el mensaje de Cristo, porque para eso existimos como Iglesia”.

Monseñor Marino, se refirió también al papel de la Iglesia frente a la pobreza y señaló la “permanente sensibilidad social” que tiene, incluso mencionó el buen desempeño de Cáritas Mar de Plata, aunque dijo, “la obra de caridad no se reduce sólo a Cáritas, sino que hay que salir al encuentro de los más pobres, acompañar y darle la mayor riqueza que tenemos que nosotros podemos dar como Iglesia que es tener un sentido por el cual vivir”.

Consultado sobre las supuestas declaraciones sobre la homosexualidad que había realizado en julio del año pasado, Monseñor Marino señaló “nunca existió esa entrevista, yo lo aclaré en un comunicado. Acabo de publicar una obra sobre este tema, donde no hay una sola línea de agresión a nadie. Quienes me conocen saben que en mi estilo no está nunca el agravio, sino por el contrario el respeto a todos. Qué se puede esperar de un Obispo, o simplemente de un cristiano bautizado sino que represente el pensamiento de la Iglesia sobre esto, que nunca es de agravio a nadie. Las personas homosexuales, para nosotros merecen todo respeto como debe ser en una sociedad democrática”. Y luego agregó “a lo largo de mi extenso ministerio sacerdotal, muchas veces he recibido a personas que tienen esta tendencia, y el principio es el que nos enseña la Iglesia; la cordialidad, la recepción muy humana. Me pregunto cuántas instituciones tienen la cantidad de documentos de orientación pastoral para el trato, el enfoque de este tema como lo tiene la Iglesia Católica. Tenemos muchos documentos donde no hay una sola línea de agresividad, ni un solo aspecto de menosprecio”. “Todo es resultado de un apasionamiento, en un clima enrarecido, en el fervor de controversia, entonces se saca argumento de cualquier cosa, de tal palabra y se tergiversa” resaltó el actual Obispo electo de Mar del Plata.

Finalmente, Marino consultado sobre la entrevista de la que se extrajeron esas cifras -que fue producida por la Agencia Informativa Católica Argentina (AICA)- aclaró, “si usted lee la nota que produjo esa agencia, dentro de un largo texto, esas palabras ocupan dos o tres líneas y están tomadas de un informe producido en un cuaderno de la UCA, no están escritas por mí, y fueron incluidas como dichas por mí en esa noticia que transmite la agencia AICA. Al otro día en ese medio corrigieron, en un comunicado y explican lo que pasó. Nunca existió un reportaje, es una nota construida sobre la base de un informe de circulación interna, de la comisión de seguimiento legislativo, que yo presido. Allí se intercambiaron opiniones y apareció esa construcción de la cual la agencia produjo esa nota”. “Que le quede muy claro que la mejor manera de disipar dudas es conocerme, conocer mi trayectoria, y estilo de trato; incluso con las personas que tienen un pensamiento distinto al mío” concluyó Marino.


Oficina de Prensa | Obispado de Mar del Plata
Pasaje Catedral 1750 PB
11:48 | Autor Iglesia Hogar

Buenos Aires, 6 Abr. 11 (AICA): El Santo Padre, Benedicto XVI, nombró obispo de la diócesis de Mar del Plata, en la provincia de Buenos Aires, a monseñor Antonio Marino, de 69 años, actualmente obispo auxiliar de La Plata.

La información del nombramiento fue dada esta mañana por el nuncio apostólico, monseñor Adriano Bernardini, a través de la agencia AICA, en simultáneo con la publicación en Roma.

Desde el 10 de marzo del corriente año, está al frente de la diócesis de Mar del Plata monseñor Armando Nicolás Ledesma, en carácter de Administrador Diocesano, cuando fue elegido por el Colegio de Consultores. Dicho cargo lo ejercerá hasta que monseñor Antonio Marino asuma el gobierno pastoral de esa iglesia diocesana. El anterior obispo de Mar del Plata, monseñor Juan Alberto Puíggari, fue promovido por el papa Benedicto XVI a la sede arzobispal de Paraná, cargo que asumió el pasado 7 de marzo.

Mons. Antonio Marino, obispo electo de Mar del Plata

Nació en la ciudad de Buenos Aires el 11 de marzo de 1942. Fue ordenado sacerdote el 27 de noviembre de 1971, por el cardenal Juan Carlos Aramburu en la catedral metropolitana de Buenos Aires.

Desde 1973 a 1978 frecuentó los estudios de Teología en la Pontificia Universidad Gregoriana en Roma, donde obtuvo el doctorado en Teología Dogmática.

En la Arquidiócesis de Buenos Aires ejerció el ministerio sacerdotal como Vicario en las parroquias San Benito Abad, Nuestra Señora de Monserrat, San José de Flores, Nuestra Señora de Luján Castrense y la Inmaculada Concepción de Belgrano.

Asimismo, ejerció la docencia como profesor en la facultad de Teología de la Pontificia Universidad Católica Argentina “Santa María de los Buenos Aires”.

Desempeñó también los siguientes cargos: Censor arquidiocesano; Director espiritual del seminario mayor metropolitano de Buenos Aires; Asesor teológico y doctrinal de la Comisión de Fe y Cultura de la Conferencia Episcopal Argentina y Juez adjunto del Tribunal Eclesiástico Nacional.

En 1993 Juan Pablo II lo distinguió con el título pontificio de Prelado de Honor de Su Santidad.

El 11 de abril de 2003, Juan Pablo II lo nombró obispo titular de Basti y auxiliar de la arquidiócesis de La Plata. Fue ordenado obispo el 31 de mayo de 2003 en la catedral de La Plata, por monseñor Héctor Aguer como consagrante principal y fueron co-consagrantes Mons. Estanislao Esteban Karlic y Mons. Mario José Serra.

En la Conferencia Episcopal es miembro de las Comisiones de Fe y Cultura y de Ministerios.

La diócesis de Mar del Plata

Historia: Creada el 11 de febrero de 1957 por Pío XII. Comprende, en la provincia de Buenos Aires, los partidos de Balcarce, General Alvarado, General Madariaga, General Pueyrredón, Lobería, Mar Chiquita, Necochea, Pinamar y Villa Gessell.

El primer obispo fue Mons. Enrique Rau, quien siendo obispo de Resistencia, el 13 de marzo de 1957 fue trasladado por Pío XII a la recientemente creada diócesis de Mar del Plata, de la que tomó posesión el 22 de julio de ese año y la gobernó hasta su fallecimiento ocurrido el 20 de agosto de 1971.

Al día siguiente de la muerte de Mons. Rau, el 21 de agosto Pablo VI designó Administrador Apostólico al arzobispo de La Plata, Mons. Antonio José Plaza, quien entregó el gobierno pastoral marplatense al segundo obispo diocesano, Mons. Eduardo Francisco Pironio. Este, siendo obispo auxiliar de La Plata, el 17 de abril de 1972 fue trasladado por Pablo VI a la sede episcopal de Mar del Plata, de la que tomó posesión el 26 de mayo de 1972. El 20 de setiembre de 1975 el mismo Pontífice lo trasladó a la Curia Romana designándolo Pro-prefecto de la Congregación para los Religiosos y los Institutos Seculares.

Tercer obispo de Mar del Plata fue Mons. Rómulo García, quien siendo obispo auxiliar de esta sede durante el gobierno pastoral de Mons. Pironio, Pablo VI lo designó obispo diocesano el 19 de enero de 1976.Tomó posesión el 19 de febrero de 1976. El 31 de mayo de 1991 Juan Pablo II lo promovió a la sede arzobispal de Bahía Blanca.

El cuarto obispo de Mar del Plata fue Mons. José María Arancedo, quien siendo obispo auxiliar de Lomas de Zamora, el 19 de noviembre de 1991 fue trasladado por Juan Pablo II a la sede marplatense, de la que tomó posesión el 15 de diciembre de 1991. Fue promovido como arzobispo de Santa Fe de la Vera Cruz el 13 de febrero de 2003.

El quinto obispo diocesano fue Mons. Juan Alberto Puiggari, quien siendo obispo auxiliar de Paraná, el 7 de junio de 2003 fue trasladado por Juan Pablo II a la sede de Mar del Plata, de la que tomó posesión el 10 de agosto de 2003. El 20 de octubre de 2010, Benedicto XVI lo promovió como arzobispo de Paraná, sede de la que tomó posesión el 7 de marzo de 2011.